Jes, la televisión en general, como que no inspira nada. Bueno, la televisión puede que sí, quienes la hacen desde luego que no.
Domingo, esa película la empecé a ver pero cuando la Verónica Forqué abrió la boca automáticamente apagué el vídeo... Diossss, qué voz más desagradable y qué doblaje más mal hecho (y dicen que el Kubrik o comocoñoseescriba lo supervisó personalmente) Lo siento, tenemos en esta España nuestra de cada día unos actores de doblaje cojonudos (curiosamente, casi todos catalinos
) y no me da la gana de tirarme una peli leyendo subtítulos... cuando lo que realmente lo que me interesa es la fotografía
Saludos...