Nombre: Voigtländer S Scopar 50/2.5
Montura original: Nikon S
Camara de prueba: Olymus EM-1 + OM macro 50/2 mm
Longitud Focal: 50mm
Abertura máxima: f/2.5
Abertura mínima: f/22
Nº de palas: 8
Nº de elementos/Nº de grupos : 7/6
Diámetro del filtro: 43 mm
Distancia mínima de enfoque: 0.90 m
Peso: 180 sin accesorios
Nº. de Serie:
Facilidad de usoHay que cogerle el punto
Precio sin portes: 200 euros
Portes desde: Alemania (fotomundus) 20 euros
Valoracion (1=Miserable, 5=Excelente): 4.5
Conservación: Se ha comprado nuevo
Calidad de imagen: 4.5
Relación Calidad/Precio 4.5
Lo mejor es... Da una nitidez fabulosa
Lo peor es... distancia de enfoque y giro solidario de los aros.
Tengo una inclinación natural por los objetivos standard de 50 mm. Simplemente es que me gustan porque su mirada es natural como la misma vida. Este Voigtlander lo he comprado por que me gusta su construcción y me trasmite unas sensaciones muy intensas. Y no es por sus cifras porque esa apertura máxima de F/2.5 no es precisamente para tirar cohetes en los tiempos actuales. Pero me recordaba mucho a un nokton 40/1.4 que vendí con la unica telemetrica que he tenido y quería volver a recordar lo que es enfocar con la precisión de estos voitgländer.
El objetivo lo he comprado nuevo con sus tres años de garantía oficial. Procede de una serie muy corta de 600 unidades que Cosina (Japón) ha fabricado ahora con las especificaciones de aquel Skopar 50/2.5 mm que equiparon las elitistas Nikon S a finales de los años 40, antes incluso que apareciera la primera reflex profesional de la marca, Nikon F, de la que muchos hoy dicen que fue una réplica (con caja de espejos) de las ranfinger Nikon S, mucho más cuidadas y exquisitas éstas y que apenas tuvieron producción y -por tanto- escasa repercusión económica para la marca.
Tiene este objetivo un esquema tradicional 7 elementos en 6 grupos y pesa solo 180 gramos sin ningún accesorio, es decir sin adaptador para nex, sin parasol y sin tapas delantera o trasera. Imagino que Cosina habrá mejorado el rendimiento de aquellos Skopar originales con algún recubrimiento multicapas pero de ello no hay información alguna.
La producción ha sido muy cuidada y viene con su tapa trasera para nikon S, por si todavía tienes por ahí una vieja telemétrica o si te apetece encontrarla de esas que andan perdidas por la red.
Otro detalle de calidad es la tapa metálica delantera con revestimiento interior de terciopelo.
O el curiosísimo parasol invertido, más estrecho por la parte exterior, lo que le confiere un aspecto minimalista y peculiar.
Otro detalle de calidad es el aro complementario que impide que los aros de foco y de palas giren solidarios al enfocar, como ocurrian con los objetivos que montaban aquellas nikon S. Ahora queda solucionado de manera elegante y totalmente funcional.
Aquí todo junto lo que viene en la caja.
Montado en la A7/r queda un conjunto muy equilibrado y totalmente vintage. Aúna el espíritu más puro de la fotografía sosegada y de calidad que particularmente me gusta: una full frame de última generación y tamaño contenido, con un objetivo compacto, totalmente manual (ni siquiera tiene diafragmas automáticos), bien construido y que sea capaz de proporcionar calidad óptica y mecánica que dure otros 50 años más, si tú quieres.
Aquí ya montado directamente para salir a la calle. Pero ahora es de noche y solo puedo hacer algunas fotos en el salon de casa. Forzadas a isos muy altos, la escasa luz artificial pone a prueba el sensor y el visor de la A7/R. Al principio creía que no enfocaba bien, pero es que este objetivo guarda una sorpresa herencia de su ADN de telemétrica. No enfoca de cerca. Hay que retirarse casi un metro para empezar a pillar foco. Una vez sabes esto le pillas rápidamente el truco. Ademas la A7R ayuda bastante en eso, el focus peaking canta muy bien los focos y la lupa termina de clavarlos y dejarlos en su sitio.
Si lo que quieres es nitidez no te preocupes este objetivo es nítido a rabiar, incluso como aquí abierto a tope.
Es un objetivo que reproduce bien cualquier paleta de colores y ofrece tonos brillantes y hermosos. Mañana trabajo hasta tarde en Cádiz, tengo un curso en el CEP, pero voy a ver si me da tiempo de salir a tiempo de pillar los últimos rayos de luz de la Bahía que son muy hermosos y puedo hacer unas fotos del puente de la Pepa al atardecer con este Skopar al que ya le estoy cogiendo cariño.
LLego corriendo a los pies del puente pero ya la luz se me escapa. No importa, esperaré a que anochezca y veré si puedo tirar a mano alzada cuando se enciendan las primeras luces de esta enorme obra en construcción. Todavía le falta un tramo y hay una barcaza y una grua que en los próximos día izaran el tramo de puente que falta y lo atornillaran a los dos extremos. El problema es que este objetivo no es muy brillante y tendré que subir los isos a tope, sobre todo si quiero sacar algunas estrellas con las luces del puente cerrando diafragmas. Tendré que apoyar la camara en la barandilla del paseo marítimo. Me salen velocidades entre 1/8 y 1/50 cerrando diafragmas. Umhhh, ya veremos....la cosa no está nada fácil.
No está mal, no han salido estrellitas pero he podido meter en primer término una embarcación que ya regresaba para amarrar en el embarcadero. El castañazo que mete el obturador de esta sony es como para dejarte sordo. Esto no es bueno para tirar sin trípode. ¡como echo de menos ahora la EM-1!. Me voy a ir un poco más atrás para enmarcar la foto con el espigon del embarcadero. Está mal iluminado y no se como saldrá en el primer término.
Ahora sí.
Una nueva con el cordón de sujeción metálico de una Icarex 35 S que también debe tener más de 40 años. Así me parece perfecta.
Y un retratillo para evaluar su condición de todo terreno.
Saludos cordiales.