Pues todo fue un cúmulo de adversidades.
Tratamos de llegar a tiempo para buscar los encuadres con luz y no andar a tientas, pero como la persona que nos debía dar acceso a las ruinas era una Concejal, pues todo era más importante para ella que las fotos salieran bien.
Al final saltó el levante con fuerza y el encuadre buscado hacía que la cámara estuviera muy expuesta al viento. Así que ya de noche cerrada, moví la cámara para ponerla a respaldo de un muro y en ese momento tuve que tocar sin querer el anillo de enfoque. Eso unido a que seguro que algunas fotos o todas tenían algo de trepidación por el viento, así salió el resultado.
En definitiva, que ni mi socio ni yo quedamos satisfechos con los resultados, así que habrá que repetir otro día
Salud.