Hola.
Copiando las buenas ideas que tienen en otras latitudes, os presento mi mochila, una
Lowepro Micro Tekker 100.
Os detallo un poquito más su contenido.
1.- La cámara (se nota, ¿verdad?). Es una Canon
40D de la que estoy muy orgulloso y contento. La compré de segunda mano el pasado septiembre u octubre a un amigo de un forero de canonistas.com por 475 euros (cuerpo sólo). Funciona perfectamente dándome muchas satisfacciones. Cubre sobradamente mis necesidades.
2.- Tapado por el paño amarillo, ahí, enganchado a la cámara, está el
Carl Zeiss Planar 1.7/50mm. Por curiosidad, fue mi primer objetivo manual y la primera piedra de unas expectativas bastante románticas sobre lo que debería ser una foto y, según mi opinión, cada vez lo es menos: un trabajo del fotógrafo y no un proceso automático de la cámara basado en numerosos patrones pre-establecidos. Su montura es Contax.
3.- Vivitar 2.5/28mm. Vive aquí
de prestado mientras decido qué hago con él. Tiene todos los números para salir en el mercado de invierno y ceder su puesto en el campo a un 24 ó 28mm de reconocimiento internacional, con sobrada experiencia y que sea titular indiscutible en su selección nacional.
4.- Mi compacta. Es una Canon
Ixus 75. Comprada hará un par de años, la llevo por si los zagales se ponen pesados con eso de imitar al padre o por si... no sé... antes creía necesitarla, pero la verdad es que creo que la llevo en la mochila para que mis pequeños monstruos no la tomen como botín. Es una buena compacta, y si saliese más de turismo puro y duro seguro que más de una vez la llevaba conmigo. Es la autora de la foto de la mochila.
5.- Tengo tres baterías: la original Canon, de 1390mAh, una clónica china de capacidad indeterminada y una Duracell
DRC511 de 1400mAh. Ahí veis la original Canon, que ya me vino con la cámara cuando la compré, y montada en la cámara está de Duracell, que es nueva y se nota en la duración.
6.- Debajo del paño amarillo, justo ahí, está la joya de la modesta corona: el
Carl Zeiss Planar 1.4/85mm. Desde que me interesé en los objetivos manuales ha sido uno de mis oscuros objetos del deseo. Llegó a mí mediante el intercambio
a pelo que hice con un
ojodigitalero por el Canon
17-40L. Creo que en ese intercambio yo salí ganando. Aún no conozco el objetivo; aún no sé lo que puede hacer, pero espero descubrirlo este buen tiempo que viene, espero, a partir de marzo. Por ello, de él sólo os puedo decir que pesa un huevo (dejemos a las malas mujeres tranquilitas).
7.- Tengo dos paños amarillos como este; los uso para dejarlos en el suelo doblados y poder poner encima de ellos la cámara, los objetivos, los tubos o lo que sea y protegerlos mínimamente. Son de Mercadona, creo; un par de lavados para quitarles la pelusilla y ya está.
8.- Cargadores de batería para la Ixus y para la 40D. Encima de ellos estaría el cable que une el cargador a la toma de corriente eléctrica y que quité para que se pudieran ver los cargadores.
9.- Meyer Orestor 2.8/100mm. A mí me gusta lo poco que he hecho con él, aunque tengo la impresión que necesita mucha luz para dar buenos resultados. Lo compré porque quería una lente con esa focal ya que el Planar 1.4/85mm estaba lejísimos de mis posibilidades. Al llegar el Zeiss, no tiene mucho sentido que tenga este objetivo, por lo que si puedo lo venderé para hacer caja. A diferencia del Vivitar 2.5/28mm, no ocupa el sitio de nadie.
10.- Tarjetas Compact Flash
Sandisk Extreme III de 4gb y 2gb. En la cámara llevo montada la de 4gb y la de 2 la tengo por si acaso la necesitara, aunque con la capacidad de 4gb y mis pocas posibilidades de salir de manera prolongada a hacer fotos estoy cubierto. Por la mochila hay alguna otra tarjeta, de tipo clónico y de distintas capacidades.
11.- Mis
tubos de extensión chinos. Según el vendedor, los tubos son de 9mm, 16mm y 30mm. Me costaron unos 12 euros puestos en casa. También necesito dedicarles mucho más tiempo, pero en esta época del año es complicadillo salir a fotografiar por dos razones: huyo del frío porque me sienta fatal y no tengo tiempo por culpa del trabajo, completamente ligado a la campaña del limón.
12.- Saquitos de gel de sílice (creo que se traduce así) para absorber la humedad y ayudar a mantener seco el ambiente. Hay un par de ellos, amén de otras bolsitas del tamaño de un sobrecito de azúcar, de esas que te regalan con cualquier cacharro electrónico, distribuidos por la mochila.
No salen en la foto el disparador remoto ni el trípode, pero eso lo dejo para otro día.