Por suerte por aquí sigue habiendo un par de ellos que reparten en los supermercados. No sé de qué hablan -están en alemán- pero me vienen de lujo para no ensuciar la encimera cuando limpio verduras o pescado. Siempre tengo en casa; y en el laboratorio. Cuando revelo negativos pongo uno en el banco, y es ahí donde doy el golpe al tanque después de agitarlo, además siempre se sale algo de líquido y así no chorrea.
Sí he notado que ahora son más finos.
Por lo demás soy un tonto, feliz e ignorante. No leo prensa ni veo la tele, y en internet sólo fotografía y porno.