¡Buenas a todos! Aquí os presento esta modestísima cámara de fuelle fabricada por la división británica de Kodak entre 1948 y 1954.
Es un clarísimo ejemplo de cámara "de vitrina", ya que en su día la compré para decorar y hoy la veo difícil de usar. Es para película 620, si alguien ha tenido alguna experiencia para convertir película de 120 a 620 que me lo cuente, porque me interesa un montón. Al margen de lo del problema de la película, esta cámara no tiene ni diafragma ni selector de velocidades de obturación... A pesar de todo, después de haberla examinado estos días, he de reconocer que me apetece usarla.
A continuación os copio aquí el texto que he redactado sobre la cámara. A quien le interese, puede ver más información sobre variantes, funcionamiento, película 620 y enlaces sobre la cámara en mi página web:
Del infinito al plano focal >
Kodak Folding Brownie Six-20.
Os agradeceré un montón si me hacéis saber cualquier fallo de información, malas traducciones, erratas, etc.
La Kodak Folding Brownie Six-20 o Kodak Six-20 Folding Brownie es una cámara de fuelle de visor simple, de película 620 y tamaño 6x9, fabricada entre 1937 y 1940 y entre 1948 y 1954 por la división británica de Kodak, Kodak Ltd., en Londres. Existen dos versiones de la cámara: una con obturador Kodette II y otra con obturador Dakon.
La Kodak Folding Brownie Six-20 con obturador Kodette II no tiene selector de tiempos de exposición, únicamente un selector de modo I (instantaneous) o B (bulb). En el modo I, el obturador se abre y se cierra a una velocidad indeterminada, por las modestas pruebas que he hecho probablemente sea 1/50s. En el modo B, el obturador se queda abierto tanto tiempo como se deje pulsado el botón del disparador. El obturador está constituido por una sola lámina metálica situada detrás de la lente. La lente (no podemos hablar de objetivo) es una Meniscus de longitud focal indeterminada y enfoque fijo. Según el manual de instrucciones, el enfoque se extiende desde 8 pies (2,4m) hasta infinito. No tiene diafragma, lo único que regula el paso de la luz es el obturador. Comparando la apertura con los diafragmas de la versión Dakon, es posible que la versión Kodette II tenga un número f de 11. A la lente se le podía añadir una lente Kodak no.250, diseñada para enfocar a distancias más cortas (3-4 pies).
La Kodak Folding Brownie Six-20 con obturador Dakon tiene dos tiempos de exposición (1/25s y 1/50s, además de los modos B y T). En el modo T (time), el obturador se abre al pulsar el disparador y se cierra al pulsarlo de nuevo. La lente es una Anaston 100mm, con aperturas de diafragma de 6.3, 8, 11, 16, 22 y 32. El diafragma está constituido por tres láminas metálicas. El enfoque es variable, entre 4 pies (1,2m) e infinito. Además, tiene un conector para flash, pero no es universal, es sólo para flashes de Kodak. Para que la cámara se cierre correctamente, el enfoque debe estar puesto en infinito.
El largo nombre de esta cámara induce a confusión. Brownie era una marca con la que Kodak designó a diversos tipos de cámaras. La primera Brownie data de 1900, era una cámara box de película 117 que se vendía por el precio de $1, un claro ejemplo de cámara para todos los públicos con la que Kodak popularizaría su lema "pulse el botón y nosotros nos encargamos del resto".
Hasta los años 60-70, el nombre de Brownie se siguió aplicando a varios tipos de cámaras (box, de fuelle, estereoscópicas, autográficas, de plástico, con flash...) y a cámaras de distintos formatos de película (117, 120, 116, 124, 122, 125, 130, 127, 620 y 110, pero ninguna de 35mm). La mayoría de las Brownies son cámaras box, sólo de la Six-20 Brownie hay un centenar de variantes. Nada en común salvo cierta facilidad de uso y bajo precio une a las Brownies. Estamos hablando, por lo tanto, de cámaras fabricadas en serie, de baja-media calidad, destinadas a un consumo de masas, incluso probablemente destinadas al consumo infantil por su facilidad de uso y por la publicidad de la época.
Se cree que el nombre de Brownie es un homenaje a
Frank A. Brownell, un diseñador de cámaras clave en la historia de Kodak, cuyo trabajo fue una clara contribución al éxito que tuvo Kodak. Por
brownies se conocen también a unos duendes creados hacia 1880 por el ilustrador canadiense Palmer Cox. La publicidad de las Brownies de principios del siglo XX estaba decorada con duendecillos, así que no es descabellado pensar que hubiera alguna relación.
Por Folding, el nombre de la cámara nos indica que tiene fuelle, al igual que otras muchas Kodak designadas con ese nombre. Por último, Six-20 nos indica el tipo de película, 620, una película prácticamente idéntica a los rollos 120 pero con una bobina distinta, lo que hace que esta cámara en particular sea incompatible con los rollos de 120. El tamaño del negativo expuesto es de, aproximadamente, 54x83mm, lo que vendría a ser un tamaño 6x9.
Es habitual encontrar el nombre de esta cámara escrito de dos maneras: Folding Brownie Six-20 o Six-20 Folding Brownie. En el modelo con obturador Kodette II el primer nombre se puede leer claramente en el frontal de la cámara, mientras que en el modelo con obturador Dakon el segundo nombre figura en una pequeña chapa metálica.
A pesar de la similitud onomástica, esta cámara no debe confundirse con otros modelos de Kodak como Six-20, Six-20 Brownie, Brownie Six-20, Six-20 Brownie Junior, Six-20 Brownie Special, Folding Brownie, etc. La falta de rigor a la hora de escribir los nombres de estas cámaras hace que algunas las veamos con su nombre en desorden, lo que aumenta la confusión.
Sinceramente, me sorprende muchísimo que una cámara así haya sido fabricada en los años 50. Sus determinantes carencias y excesiva simplicidad me inducen a pensar que realmente fuera una cámara destinada a niños o a jóvenes, en cualquier caso a completos inexpertos en fotografía. No me cabe en la cabeza cómo una cámara de estas características se relanzara en 1948, después de su primera fabricación entre 1937 y 1940. Es cierto que el modelo con obturador Dakon parece una cámara más moderna, pero para mí no deja de ser un anacronismo, una cámara de los años 30 vendida en los 50 sin adaptarse apenas a los nuevos avances.
En fin, debió de ser un producto barato, se fabricaba en serie... supongo que tendría su público.
Chuck Baker afirma que pudieron fabricarse más de 300.000 ejemplares, lo que no está nada mal, algo de éxito sí tendría.