La idea es buena, pero le falta el toque final.
Para empezar, voltea la foto, para que no queden las letras al revés. Así quitas la noción de reflejo y refuerzas la de rotura.
Después recorta por debajo para eliminar esas sombras que distraen tanto. Especialmente la sombra negra de la derecha.
Con eso la foto seguro que gana en fuerza, y el mensaje también.
Sobre el tema en cuestión, hemos de quitarnos complejos: si no hay dinero para terracitas, pues nos llevamos algo de casa y nos sentamos en un banco del parque. Y al que le pique, que se rasque. En esencia es lo mismo: disfrutar del avituallamiento a la fresca, con la mejor compañía posible.
Saludos.