A unos pasos de la Catedral de Barcelona se encuentra la plaza de Sant Felip Neri, un oasis de paz centrada por una sencilla fuente. La fachada de su iglesia de estilo barroco, construida entre 1721 y 1752, herida para siempre por la metralla y la munición, recuerda tiempos turbulentos de un pasado no tan lejano.
En contraposición a aquellos terribles sucesos, unos niños juegan, corren y rien en la hora del recreo. Nos dicen que la vida continúa y fluye sin cesar.
HP5+, D76 (1+3, 17 min)
Saludos