El Nikkor Ais 24mm f2,8 es uno de los 24mm mejor acogidos entre los usuarios de objetivos manuales.
Lo he probado en la G1 con una combinación de dos adaptadores: un adaptador Nikon-EOS acoplado al objetivo, y un adaptador EOS-Micro 4/3 entre ese conjunto y la cámara. El conjunto, sin embargo, quedaba bien ajustado.
La construcción del objetivo no deja mucho que desear. El anillo de enfoque se mueve suavemente, sin holguras, con una longitud de giro de unos 80º. Como suele ser habitual en estas focales tan cortas, el noventa por cierto del recorrido corresponde a los primeros 2-3 metros, para llegar al infinito después en un espacio muy corto de giro.
El anillo de diafragmas –que van desde la apertura máxima de f2,8 hasta la mínima de f22- es menos fácil de accionar. Situado justo al límite de la montura, tiene unos clics muy contundentes –nada que ver con los de un Carl Zeiss Jena, por ejemplo-. Hay que accionarlo con firmeza para ir “saltando” de diafragma en diafragma. No hay parada intermedia, sólo es posible seleccionar la apertura completa.
Una de las características del sistema de lentes de este objetivo es la inclusión de una lente flotante destinada a obtener un excelente rendimiento a distancias cortas. Más adelante veremos un ejemplo tomado a la distancia mínima de enfoque, que es de 30 centímetros.
Y poco más que añadir. Paso a mostraros unos ejemplos donde veremos las características del objetivo. Como todo lo probado en la G1, hay que tener en cuenta que estamos desechando toda la parte “mala” del objetivo, pues el sensor de la G1 tiene aproximadamente la cuarta parte de la superficie de un negativo. Así pues, dejaremos de lado temas como el viñeteo.
Con una apertura de f2,8 y una distancia mínima de enfoque de 30 centímetros se puede jugar a aislar el motivo del fondo, a pesar de tratarse sólo de un 24mm. El bokeh, agradable, nos ayuda a que los resultados sean los esperados.
En este recorte al 100x100 veremos que pese a que estamos utilizando la apertura máxima, la nitidez es más que correcta (no hay máscara de enfoque), y las aberraciones cromáticas son contenidas. En este caso, observamos unos ligeros perfiles azules rodeando el cabo.
En el siguiente recorte, ya a f5,6, observamos en un motivo más revelador las ACs en forma de perfiles azules en las ramitas del jarrón. Teniendo en cuenta de que estamos observando al 100x100 en una foto de más de 10Mpix, no está nada mal.
Ahora a f4 vemos que este Nikkor nos puede dar imágenes con cierto efecto 3D.
En el siguiente recorte de esta toma a máxima apertura veremos más claramente el detalle del bokeh de este Nikkor.
Ahora una toma a la distancia mínima de enfoque. La lente flotante que incorpora en su diseño hace que el rendimiento centro-esquina sea óptimo aún en el extremo.
Saludos.
