Yo tambié tuve bichejos en mi Pentax K2, hace muchos años. Eran dos, uno relativamente grande y otro minúsculo. Se paseaban por el espacio que hay entre la pantalla de enfoque y la cara inferior del pentaprisma. Como en la K2, la pantalla no es intercambiable no había otra solución que enviarles una orden de desalojo (de la que no hicieron ni p... caso ) o usar sistemas violentos. Al final me decidí por la naftalina. No lo recomiendo hoy día, sobre todo en camaras de electrónica moderna. Puse la cámara, sin objetivo, boca abajo sobre un pastilla de naftalina y lo dejé varios días. La pastilla iba dentro de su envoltorio de plástico, pero hice unos cuantos agujeros para que los vapores pudieran salir. .Lo cierto es que cuando fui a mirar ya no había ni rastro de los bichos y no volvieron a aparecer más. La cámara salió indemne. La verdad, tenía miedo que el recubrimiento de plata del espejo o la pantalla quedaran algo afectados por los vapores, pero no hubo ningún efecto nocivo.