Una en verdad atractiva e interesante composición, maese Kowska. Pláceme esa profundidad "inversa" que confiere el espejo con el espacio que en él se refleja y la paradoja que supone vuestro reflejo en él frente al vacío espacio que media.
Pláceme, del mismo modo, ese blanco y negro que tan bello grano luce.
Un cordial saludo.