Buen tiro, maese Jesito. Esa densa humareda, y ese amarillo con que el sol la tiñe, transmiten buena parte del dramatismo de la situación.
Como nuestro solar patrío no se halla ya en suficiente penosa situación, sólo nos falta que, además, se nos convierta en cenizas
Época crítica en la que entramos, para los incendios forestales. Esperemos no hayan muchos y que controlados sean a tiempo.
Un cordial saludo.